El Cerro comenzó el partido con su 4-4-2 patentado, con un doble 5 que mete miedo y cada vez adquiere mayor relevancia. Valentín Caironi, el volante de construcción que está teniendo un nivel altísimo en este arranque del torneo; y Marcos Piñeyro, el volante de destrucción que jugó un partido de aquellos.
El partido comenzó dominado por los de la camiseta blanco y cielo, con varios tiros que medían al arquero de "El Gordo" pero sin mayor peligro. Hasta que desde un tiro libre proveniente desde la izquierda, ejecutado por Michi, dejó sólo en el punto de penal a su hermano, Darío, para que con un hermozo frontazo al ángulo pusiera en ventaja al equipo. Festejos, gritos de gol........ banderín arriba, offside, y gol anulado por el árbitro. 0 a 0 seguía el partido y había que seguir intentando. El gol estaba por venir.
Sin embargo, el Cerro quería ampliar la diferencia a través de los desbordes de Meroni por la izquierda y con las llegadas sorpresivas del volante Mantovani por la derecha. Sin embargo, lo que se venía esperando hace tiempo ocurrió. Se dice que lo acontecido fue uno de los más temidos presagio de los mayas, junto con la destrucción del mundo en el 2012. Un centro (nuevamente M. Michi) que parecía tener como destino las manos del arquero, vio violentado su condición de espacio-tiempo y desviado hacia un lado del arco por una cabeza... y que cabeza... CARUSO, consagrado con la condición de ídolo por la fracción mas "áspera" de la barra, se encargaba de poner las cosas 2 - 0 para el Cerro. Una mezcla de gritos, abrazos y alguna lágrima se dieron en el festejo tan esperado por todo jugador y seguidor del equipo. No por nada en especial, sino como merecimiento por la actitud demostrada por este personaje siempre que juega, ya sea 80 como 30 minutos.
Charla de entretiempo, donde se remarcó la necesidad de seguir jugando igual, y no dormirse. Así fue.
El 2do tiempo arrancó con el Cerro atacando, como todo el 1er tiempo, y el equipo rival tratando de acomodarse con un jugador menos. Esto lo desgastó físicamente, y por otro lado, mentalmente ya que los ataque eran frustados por los defensores paceños. Con el picante Diorio (otro de los que está demostrando un buen nivel en el arranque del torneo) en cancha, el Cerro seguí intentando. Sería este el encargado de poner el 3-0 y dar tranquilidad al equipo. El Cerro no se conformaba y pudo ampliar la diferencia con un cabezazo de Bretto (uno de los mejores del encuentro) que atajó el portero rival.
Pero la tranquilidad no duró demasiado, por lo menos, no en las mentes de los jugadores. Entra Meroni como enganche, y el Cerro pasa a jugar con un 4-3-1-2 que le da mucha más verticalidad al equipo y casi siempre desacopla las líneas. Más que nada, se debe a que es un esquema que tiene poco uso en el equipo y las características de los jugadores no ayudan al mismo. Pero no estuvo de más usarlo, ya que nunca se sabe cuando hay que sacarlo a flote.
Fue por eso, que el partido se transformó en un ida y vuelta constanste convirtiendo el partido en una sucesión de contrataques. Fue por esta fórmula que el equipo encontró los goles restantes. Primero con un tiro desde afuera de D. Michi, el cual da rebote el arquero y Caruso (sí, el mismo) se encarga de transformar en gol. Y luego, el volante de muy buen nivel (y apodos como "robacuna", "sincódigos", etc) Valentín Caironi, le pega desde fuera del área y con el arquero desacomodado mete el 5 - 0 definitivo.
Pitazo y final del encuentro. Resultado que sirve para seguir en la búsqueda del ascenso a la "B". Aunque todavía falta mucho.